Acuerdo se firmó la semana pasada en el tribunal de Putaendo, luego que el abogado de la parroquia San Antonio y el abogado de los locatarios lograron  un importante acuerdo para evitar el desalojo de varios locatarios del mercado Dolores Otero de Putaendo.

Por Patricio Gallardo M.

Finalmente los locatarios que han sido notificados de la demanda interpuesta en su contra por la parroquia San Antonio de Putaendo y que buscaba el desalojo de las dependencias del mercado Dolores Otero, lograron un importante acuerdo  en los tribunales los que les permitirá estar un año más antes de  tener que abandonar definitivamente el recinto.

Elizabeth Menares, una de las locatarias afectadas por la demanda señaló a nuestro medio que se logró un acuerdo con el abogado de la parroquia en los tribunales de justicia lo que se traduce en que el día 02 de Enero del año 2.021 el recinto debe estar desocupado. “Estamos contentos pues creemos es un plazo razonable, tenemos un año para buscar un lugar donde seguir trabajando eso es lo que pediamos, un tiempo razonable, la parroquia si hubiera dicho desde un principio esto habríamos llegado a un  acuerdo hace rato pero nunca pudimos conversar, solo en los tribunales pudimo sentarnos a  dialogar, queremos agradecer a la abogada Yetzarel Navia que nos ayudó mucho y  reitero lo importante es que tenemos un año para salir del mercado”. Indicó Elizabeth Menares

“Entrevista con el padre Vicente Montenegro el 5  de Noviembre del año pasado” 

Padre Vicente Montenegro “El mercado Dolores Otero es un elefante blanco que se sigue deteriorando”

Fue el propio padre Vicente Montenegro quien accedió a conversar con nuestro medio sobre esta situación indicando que efectivamente luego de un profundo análisis en conjunto con el consejo económico parroquial se tomó la decisión de interponer esta acción judicial pues es la manera formal de conversar y llegar a un acuerdo , pues para nadie es un misterio que el actual mercado dolores Otero es “Un elefante blanco que se sigue deteriorando” y que necesita una profunda reestructuración no tan solo en lo arquitectónico y patrimonial si no que en lo relacionado al enfoque que debe darse al local que hoy no es un alivio económico para la parroquia pues todo lo contrario no está cumpliendo el objetivo de financiarse por ejemplo para hacer reparaciones y mantenciones muy necesarias.

Después de conocer los detalles del acuerdo intentamos tener una versión por parte de la parroquia de Putaendo quienes se excusaron de referirse al acuerdo al cual se llegó en los tribunales.