Luego de diferentes reuniones con los directivos de los establecimientos, el Servicio de Salud Aconcagua incluyó nuevas medidas en la estrategia para afrontar la pandemia, por lo que pidió a la comunidad respetarlas y facilitar el trabajo de los equipos de salud.

Tras visitar y evaluar en terreno las medidas aplicadas tanto en el Hospital San Camilo de San Felipe y el Hospital San Juan de Dios de Los Andes por la alerta sanitaria decretada por el Ministerio de Salud, las autoridades del Servicio de Salud Aconcagua presentaron nuevas medidas para enfrentar esta pandemia.

“Hemos dispuesto un plan especial en nuestros establecimientos hospitalarios que está orientado a disminuir las aglomeraciones y además a realizar una priorización de nuestros recursos en función de la alerta sanitaria. Por lo mismo hemos reducido el horario de visitas a media hora y tan sólo una persona. También hemos suspendido tanto las intervenciones quirúrgicas electivas como los policlínicos, que es uno de los lugares donde se concentra una gran parte de nuestros usuarios”, destacó la Directora Susan Porras.

En cuanto a la atención primaria, la autoridad destacó que se ha suspendido la mayor parte de las consultas programadas y el funcionamiento de los programas por etapas del ciclo vital, pero se mantiene la atención médica, con el fin de facilitar el trabajo de los servicios de urgencia hospitalarios. “Tenemos una coordinación con los directores de establecimientos tanto de nuestra dependencia como municipales, por lo que hemos establecido un plan de contingencia que permita que la atención primaria funcione con lo estrictamente necesario para enfrentar esta alerta. Este es un trabajo en red y todos lo hemos entendido desde esa perspectiva”, subrayó la Doctora Iris Boisier, Subdirectora de Gestión Asistencial.

En cuanto a los Servicios de Urgencia, se destacó que se reforzarán para atender la llegada de usuarios, pero enfatizando en que la comunidad debe concurrir a ellos en caso de que sea estrictamente necesario, para evitar las aglomeraciones y además para favorecer la atención de quienes realmente lo necesitan. En este mismo punto, la Directora Susan Porras resaltó que estos dispositivos sanitarios no entregan certificados que acrediten que una persona no tiene el COVID-19, por lo que pidió a la comunidad no solicitar este documento y facilitar la atención de los usuarios que realmente requieren la atención.

Finalmente, ambas autoridades invitaron a la comunidad a mantener las medidas de prevención como el lavado de manos, mantener la distancia de un metro de otras personas, no exponerse a las aglomeraciones y también respetar la priorización que se ha hecho para los grupos objetivos en la vacunación contra la influenza.